abril 19, 2011

Fuimos mi indecisión y yo a alquilar una película. Después de treinta o cuarenta minutos escogí una.
Es triste -me dice el empleado- al final la mina se muere. "Al final la mina se muere", pensé...a elegir otra. 
Una que parecía buena, con unos chicos remontando barriletes. Esta también esta buena y no es tan triste -me dice el tipo- al final al nene lo curan y se salva.
Lo mire sin evitar odiarlo: "Flaco, me estas contando todos los finales"
-Huy...perdona no me di cuenta...
Voy en busca de la tercera, de la vencida. Una de adolescentes americanas con guitarras a orillas de un lago. 
-No es muy buena...la rubia se termina quedando con el novio de la amiga...
Lo miro con odio. Hay una maldad en ese empleado que es evidente. Vuelvo a las bateas y reviso hasta que la encuentro. Algo de cine húngaro, croata o lo que sea. -¿Esta que tal esta?, le pregunto sospechando la respuesta. 
-Mm...esa no la vi...-responde algo confundido y notablemente irritado.
Entonces me llevo esta.

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